martes, 29 de septiembre de 2009

Análisis del profesor


Cada profesor tiene una manera de enseñar, lo sepa o no, adopta una o varias teorías de aprendizaje que aplica en su práctica educativa; ayudado por sus experiencias y por las estrategias de teorías de aprendizaje en boga.
Las teorías del aprendizaje ofrecen al diseñador de instrucción: estrategias y técnicas para facilitar el aprendizaje así como una selección inteligente de las mismas:
El conductismo entiende por aprendizaje el cambio duradero y observable de conducta, como resultado de una experiencia. Siendo Skinner uno de sus grandes exponentes.
Entre los tipos de Aprendizaje los conductistas intentan prescribir estrategias que sean más útiles para construir y reforzar asociaciones estímulo-respuesta, incluyendo el uso de “pistas” o
“indicios” instruccionales (“cues”), práctica y refuerzo.
La meta de la instrucción para los conductistas es lograr del estudiante la respuesta deseada cuando se le presenta un estímulo y para ello Gropper (1987, citado por Peggy A. Ertmer y Timothy J. Newby, (1993), establece que el trabajo del educador/diseñador para facilitar el aprendizaje es:
1.- Determinar cuales “pistas” o “indicios” (“cues”) pueden “extraer” la respuesta deseada.
2.-Organizar situaciones de práctica en las cuales los “provocadores” (“prompts”) se aparean con los estímulos que inicialmente no tienen poder para lograr la respuesta.
3.- Organizar las condiciones ambientales de tal forma que los estudiantes puedan dar las respuestas correctas en la presencia de los estímulos correspondientes y recibir refuerzos por las respuestas correspondientes.




A finales de los años 50, la teoría de aprendizaje comenzó a apartarse del uso de los modelos conductistas hacia un enfoque que descansaba en las teorías y modelos de aprendizaje provenientes de las ciencias cognitivas. Psicólogos y educadores iniciaron la desviación del interés por las conductas observables y abiertas y en su lugar acentuaron procesos cognitivos más complejos como el del pensamiento, la solución de problemas, el lenguaje, la formación de conceptos y el procesamiento de la información (Snelbecker, 1983).
La teoría cognitiva está basada en el modelo del procesamiento de información y propone que el cerebro posee, al igual que la computadora, registros o memorias y la capacidad de ejecutar procesos. (asociacionistas para Pozo).
La memoria posee un lugar preponderante en el proceso de aprendizaje; ya que este resulta cuando la información es almacenada en la memoria de una manera organizada y significativa
La instrucción para facilitar el aprendizaje, debe basarse en las estructuras mentales, o esquemas, existentes en el estudiante. Debe organizar la información de tal manera que los estudiantes sean capaces de conectar la nueva información con el conocimiento existente en alguna forma significativa.



El siguiente mapa representa las memorias y los procesos cognitivos en un orden lógico, y representan las etapas desde el momento en que se presenta un estímulo, que pasa por distintos procesos y memorias, hasta que éste se almacena y puede ser posteriormente recuperado o recordado.


En realidad no existe una teoría constructivista única, sino varias teorías emparentadas (La Gestalt, de Piaget, de Vigotsky, de Ausubel y de Bruner). El constructivismo no es un enfoque totalmente nuevo del aprendizaje; ya que posee múltiples raíces en la óptica tanto filosófica como psicológica de éste siglo.
En el Constructivismo los humanos crean significados, no los adquieren. Dado que de cualquier experiencia pueden derivarse muchos significados posibles, no se puede pretender lograr un significado predeterminado y correcto.
En la medida que uno avanza desde el conductismo hacia el cognitivismo y al constructivismo, el foco de la instrucción cambia de la enseñanza al aprendizaje, de la transferencia pasiva de hechos y rutinas hacia la aplicación activa de las ideas a los problemas. La Instrucción para facilitar el aprendizaje en el constructivismo debe: primero instruir al estudiante sobre como construir significados y como conducir, evaluar y actualizar efectivamente esas construcciones y segundo diseñar y ajustar experiencias para el estudiante de manera que los contextos puedan experimentarse de forma auténtica y coherente. A través de modelaje y monitoreo por expertos comprometidos en casos auténticos, el diseñador novato experimentaría el proceso inmerso en el verdadero contexto de una situación problemática real.
Por todo lo anterior se determina que el profesional no puede darse el lujo de ignorar ninguna teoría que pueda ofrecer implicaciones prácticas. Dada la gran variedad de situaciones potenciales de diseño, el "mejor" enfoque del diseñador nunca sería idéntico a ningún enfoque previo, sino que realmente dependerá del contexto. Este tipo de selección tan particular a cada caso, ha sido denominada "eclecticismo sistemático" y ha tenido un alto grado de respaldo en la bibliografía sobre el diseño de instrucción (Snelbecker, 1989).

No hay comentarios:

Publicar un comentario